En caso de fracturas en la órbita, es posible la reconstrucción quirúrgica. Durante la cirugía se estabiliza la lesión y luego de acceder al daño, se realizan trabajos de reconstrucción con placas y tornillos de titanio, y también se puede utilizar malla de titanio para reconstruir las paredes de la órbita. La cirugía está indicada en caso de fracturas severas y deformación del rostro. Estas condiciones pueden dificultar la realización de funciones básicas de la cara y pueden afectar la visión.

En caso de fractura de nariz, se puede reconstruir quirúrgicamente. La sangre se drena de la región, y los huesos se acomodan y reparan con gasa o férula en el interior y yeso o aquaplast en el exterior. La indicación para la cirugía ocurre en casos de fractura severa, deformación de la nariz o cuando la respiración es difícil.

En caso de fractura de la mandíbula, es posible realizar la reconstrucción quirúrgica. Durante la cirugía, la lesión se estabiliza y después de acceder al daño, se realizan trabajos de reconstrucción y se pueden usar placas y tornillos de titanio para sostener la mandíbula. Estas condiciones pueden dificultar el desempeño de las funciones básicas de la cara y pueden dificultar la alimentación y la respiración.

En caso de fractura de la mandíbula, es posible realizar la reconstrucción quirúrgica. Durante la cirugía, la lesión se estabiliza y después de acceder al daño, se realizan trabajos de reconstrucción y se pueden usar placas y tornillos de titanio para sostener la mandíbula. Estas condiciones pueden dificultar el desempeño de las funciones básicas de la cara y pueden dificultar la alimentación y la respiración.

En caso de fracturas de mejillas y mandíbulas, es posible la reconstrucción quirúrgica. Durante la cirugía, la lesión se estabiliza y después de acceder al daño, se realiza un trabajo de reconstrucción, y se pueden usar placas y tornillos de titanio para soportar las estructuras y las trazas de fracturas. La indicación de cirugía ocurre en casos de fracturas severas y deformación de la cara. Estas condiciones pueden dificultar la realización de funciones faciales básicas y pueden afectar la visión, la nutrición y la respiración.